El corte

Apenas bajó del colectivo, vio la camioneta de la policía del otro lado del puente y caminó en otra dirección. Cuando estimó que el semáforo les había habilitado el paso retomó su curso, cruzó el puente de la panamericana que iban a cortar en unos minutos y encaró para el barrio. Recordó la primera vez que había ido.

Caminaba entre escombros. Este barrio lo van a volar a la mierda, penso.
Quedaban algunas casas dispersas aqui y allá, muy dificil armar una resistencia, aunque no imposible.
Supuso que el lugar donde se juntaria la gente seria en aquella casa y fue para allá.
Cruzo la medianera y sonrió, no esperaba encontrar caras conocidas
- No te puedo creer, con barba y tatuajes pero sos vos, no?
- Si, soy yo
- Vico, mira quién esta acá!!
Apareció la morocha mientras se daban un abrazo.
- Noooo- dijo Vico abriendo los brazos
- Estás vos aca?- le dijo a Vico- entonces esta cubierto esto, no necesitan ayuda!
- Qué es de tu vida? Veni Lu!
- Aca ando.. estoy en CIBA, en capital, y me pidieron que me dé una vuelta por aca, porque están por desalojar, no?
- Si, un quilombo, que bueno que viniste- apareció otra morocha, de ojos bien negros y brillantes- te presento a Juan, un amigo de la vida, nosotros ibamos, te acordás boludo? ibamos a Carupa, en que año era?
- Era en la epoca en que no le decíamos militancia a la militancia
- Tal cual, y también fuimos al docke
- El docke!- recordó chicos jugando entre destilerias de petroleo
- Y que onda tu situación, seguis..?
- No, estoy sancionado hasta abril
- Y qué hiciste?
- Y, agarré y me fui a Honduras
- Jajaj, no te puedo creer! yo anduve por Mejico y Nicaragua
- Que buenos lugares, que bueno verte boluda
- Tenemos que tomar mate!
- Quiero suponer que tenés mate ahora
- Obvio, ahora pasamos con la gente- lo miró como si fueran dos paisanos en tierra extranjera- te diste cuenta que nunca vamos a poder sentar cabeza?
Sonrió desde el alma y asintio- Es verdad. Y siempre nos encontramos en lugares hechos mierda, pero con mucho pueblo
- Tal cual
- Che, aca están en el horno, esto lo van a terminar tirando a la mierda, lo saben, no? lo unico que se puede ganar es tiempo.
- Tenés idea como?
- Si, hay juicio?
- Creo que no.
- Hay que averiguar eso, estas tierras de quien son?
- De nadie, el gobierno quiere hacer un parque, para después hacer un barrio privado, ya desalojaron a 300 familias, quedan 11, de los más antiguos, acá hay gente viviendo hace más de 40 años
- Entonces la tierra ya es de ellos
- Pasemos y te presento
Adentro habia mate, y unas 10 familias sentadas con miradas tristes.

Vico lo presentó y se sentó.
- Quién de ustedes llamó a CIBA?
- Yo- levanta la mano una mujer- Trabajo en una cooperativa de viviendas en capital, pero no tenemos mucha idea de qué hacer en estos casos, y se me ocurrió avisar a CIBA.
- Alguien tiene idea si hay juicio de desalojo?
- No, no hay
- Entonces no los pueden desalojar. Sin juicio y sin orden de desalojo no puede venir nadie, por muy alto cargo que tenga o sea policia, a sacarlos de su casa. Ellos van a querer llegar a un acuerdo extrajudicial, porque el juicio demora un año más o menos, y siempre van a tratar de ofrecerles menos de lo que corresponde, por los años que ya hacen que estan ustedes tienen que negociar como dueños.
- Y si no nos queremos ir?
- Supongamos que tienen orden de desalojo, (para lo cual les tuvieron que mandar un aviso primero, no dejen que venga alguien de un dia para el otro con un papel diciendo que es la orden) igualmente el desalojo se puede resistir. Cuántos de ustedes tienen terraza?
Levantan la mano la mitad.
- Eso favorece, después vamos a ir casa por casa y les enseño como se hace. Igualmente, a la larga los van a sacar, ya demolieron la mayoria del barrio, no van a renunciar al terreno por las casas que quedan, evitar el desalojo de todos se hubiera podido evitar antes, ahora lo que se puede pelear es lo que les vayan a dar.
- Nos amenazaron con mandarnos la hinchada de tigre.
- Todos tienen los celulares de todos?
- Si
- Despues les doy el mio, me dijeron que de las 300 familias que ya mudaron están a 4 cuadras y estan disconformes, se puede contar con ellos como apoyo si pasa esto?
- Si, algunos son familiares de los que todavía resisten.
- Cascotes hay por todas partes.
Algunos sonrieron.
- Uno de los abogados de CIBA tiene matricula en provincia, vamos a sacar un recurso de amparo, para tener un paraguas jurídico, para que no puedan desalojar sin orden, igualmente si pasa esta noche o mañana hay que estar atentos, tengan siempre a mano una posibilidad de filmar, o con camara o con celular, ustedes no salgan de sus casas y pidan apoyo externo a los compañeros que ya fueron mudados, me llaman a mi y en seguida llego con algunos compañeros mas.
- Todos los días aparece alguien queriendo negociar con algunas familias, pero lo hacen por separado, y amenazan.
Recordó que era lo mismo que hacía el intendente de tartagal con los que habían perdido todo en el alud, para tratar de dividir a la gente. Parece como si todos leyeran un manual, pensó, el manual del hijo de puta.
- Tienen que decirles que acá ya se formó una asamblea, y que van a discutir lo que les ofrecen con la asamblea, la palabra asamblea no les va a gustar nada. Siempre van a tratar de dividirlos. Para dar pelea tienen que estar decididos y unidos.

Ya habían pasado varios meses, con mucho esfuerzo la gente se había ido organizando de a poco, ya habían intentado las vías institucionales posibles. Lo primero que hicieron fue intentar sacar el amparo e iniciar el trámite de usucapión. El amparo para frenar un eventual desalojo compulsivo, tenían miedo de que les pasara lo mismo que al barrio San Jorge, también de San Fernando, que hacía unos meses les habían caído a la madrugada con 100 policías de infantería, 50 de caballería y topadoras, sin ninguna orden de desalojo y les habían tirado el barrio abajo sin esperar siquiera que terminaran de salir de las casas, y esa noche habían dormido en la calle, mujer embarazada y niños inclusive.
Elaboraron un amparo de 40 páginas, lo habían firmado todos y estaban por presentarlo cuando surgió un problema: a una vecina le ofrecieron un poco más de plata (aunque seguía siendo ridículamente poca) y arregló con la municipalidad. El amparo se apoyaba en el testimonio de esa vecina, que era la única a la que habían amenazado de desalojo explícitamente en las entrevistas. Le habían dicho que se conformara con los diez mil pesos que le ofrecían porque total donde ella vivía "era una cuchita" y que si no aceptaba después no les iban a poder dar nada, que de ahí los iban a sacar sí o sí.
Paralelamente Juan contactó a un agrimensor, padre de una vieja amiga, para iniciar el trámite de usucapión, por el cual, gracias a la ley veinteañar las tierras pasaban a sus manos. También estaba la ley Pierri, que era un trámite más rápido, no necesitaban abogado ni agrimensor y también, si hacía 10 años que habitaban pacíficamente la tierra, les correspondía por derecho. Pero la ley Pierri, justamente por ser una ley que favorecía a los más pobres contra la burocracia, de hecho no se aplicaba en ningún lado. El juicio de usucapión podía llevar un par de años, y había que pagar cerca de dos mil pesos en impuestos para hacerlo, pero si entre las 10 familias juntaban para hacerlo por uno de los terrenos, una vez iniciado les iba a dar pie para negociar mejor, porque con un usucapión en trámite no te pueden desalojar ni con orden de juez y acordaban con la familia que vivía en ése terreno que nadie firmaba nada con la municipalidad hasta que fuesen exitosas las negociaciones con todos.
Si bien el agrimensor pudo sortear el trámite inicial con el municipio para saber el número de lote (los vecinos lo habían intentado y se lo negaban) el trámite lo frenaron en la plata, cuando se quiso sacar el dominio, que era un requisito indispensable para iniciar el trámite. A Ramón, uno de los vecinos, cuando les dijo que iban a iniciar el usucapión, le habían dicho que no lo iban a poder realizar, que iban a tener un techo, y ellos les iban a frenar el trámite.
A menor escala, volvía a pasar lo mismo. En la década del 70' la lucha armada había sido la respuesta al cierre de los canales institucionales. Cuando conseguían votar un presidente más o menos coherente, que no tranzaba con las petroleras extranjeras, ni se bajaba los pantalones ante Estados Unidos, que no permitía el libre comercio, un sistema de hambre que vivimos hoy día, la aristocracia argentina movilizaba al ejército y hacían un golpe de Estado, para poder imponer un sistema que les permitiese seguir negociando. Como nunca iban a poder imponer ese sistema de explotación y desigualdad por consenso y votación, lo hacían por la fuerza, torturando y desapareciendo gente. Todo fue por plata.
Acá también, los estaban forzando a pasar a la "lucha armada" para no ser pisoteados, y después de mucho esfuerzo para vencer los miedos, Juan los había concientizado de que debían implementar una medida de fuerza. Y también, había negociados de por medio, se habían ido enterando de que el barrio privado que tenían al lado, había aumentado el precio de sus lotes de 80 mil a 100 mil dólares desde que había sacado a las 280 familias, y se decía que cuando terminen de "erradicar la villa" iban a poder vender los lotes a 120 mil, y alguna parte de esa torta iría para el municipio. Bastante mas que los 10 mil pesos que les querían ofrecer al principio.
Llegando a lo de Nancy vio que la camioneta policial había estacionado frente al barrio y se sumaba una segunda. Nancy se acercó a saludarlo, sonriente, pero nerviosa.
- Se filtró?
- Parece que sí.
Habían acordado no hablar con nadie del corte, salvo con los que iban a participar, y si alguno iba llamando a los medios se decía la zona y la semana, pero no el día ni la hora exactos, para que la policía no se adelante y les impidiese cortar.
- Nos vemos en lo de Ramón.
Cuando pasó por lo de otra vecina, que también lo saludó haciendo alusión a los patrulleros, le dijo:
- Puedo dejar los palos acá?
- Sí.
Si bien los traía envueltos en una tela negra, si lo veían los iba alertar de que el corte era inminente.
- Nos vemos en lo de Ramón.
- Sí, abrieron la capillita de al lado, para prepararnos ahí.
- Buenísimo.
Mientras caminaba hasta ahí mandó dos mensajes de texto avisando que estaban en la capilla a un militante de un apoyo escolar de un barrio vecino que les había prometido apoyo y otro a Lucila, que iba a estar en el barrio de las 288 viviendas porque habían fallecido 2 vecinos (y por eso no se iban a sumar, sino se iban a sumar al corte porque las casas que les habían dado eran muy chicas y hacía meses les habían prometido gas y todavía no lo ponían).
Ramón salió a recibirlo.
- Tenemos compañía
- Sí, igual tienen conos en la caja, por ahí vienen para ocuparse del tránsito. En teoría tienen que permitirlo, porque vamos a dejar un carril libre.
Había costado mucho convencerlos de la necesidad de implementar una medida de fuerza, finalmente habían aceptado dejando un carril liberado, que era algo que no tendría por qué tener represión, era el justo derecho a reclamo, pero con la policía nunca se sabe.
Entró a la capilla. Hacía años que no entraba a una. La miró un segundo, era de los mejores lugares para celebrar, sencillo, simple, pero enseguida se concentró en el pasacalle que estaba en el piso y había que pintar.
- Hay un par de ideas, hay que elegir una- Ramón le alcanzó el papel.
- ...San Roque de pie y en lucha" ¿quién las escribió?- si bien habían crecido mucho en conciencia todavía no les había enseñado a expresarse así.
- El chico del apoyo escolar que nos van a venir a ayudar.
Sonrió, los había encontrado de casualidad, cuando publicó el problema en la agencia Walsh, le contestaron ofreciendo ayuda, estaban laburando en el barrio de al lado pero no se conocían. Fue personalmente, después se los encontró en los juicios a los militares de Campo de Mayo y se enteró que también familiares de ellos habían sufrido la represión, y hacía poco había ido a apoyarlos en la toma del lugar donde estaban trabajando, que era un centro de jubilados, porque de un día para el otro les negaron la llave, a pesar de que era un espacio municipal y lo único que hacía era enseñar a los pibes y darles una merienda. En menos de un día consiguieron las llaves. A veces el único idioma que entienden esos hijos de puta es una medida de fuerza. La semana anterior al corte organizó una reunión donde se encontraran todas las fuerzas que iban a participar, y había salido muy bien. Los chicos del apoyo escucharon de los mismos vecinos del barrio sus necesidades y se comprometieron enseguida. A Juan lo sorprendió cómo habían crecido en ese tiempo y la claridad que habían ganado en explicar lo que pasaba y a lo que tenían derecho. Casi que se sintió orgulloso como un padre.
- Y las gomas?
- Están en casa.
Salió, la cana se había ido.
- Se fueron
- Sí, igual hay que estar atentos
- Por ahi estaban descansando a la sombra nomás
Se movió rápido, convocó a un par de familias que faltaban, fue a ver cómo se podía colgar el cartel del puente peatonal, llevó los palos a la capilla. Llegaron los del apoyo. A la media hora no llegaban a 15 personas. Le mando un mensaje a su compañera: "Todavía no llames a los medios, yo te aviso".
- Elijan una de las frases y pinten nomás.
Sacó una botellita con nafta de su mochila.
- Eso no es Fernet, no? este es piquetero en serio, es una molo?- dijo el que había propuesto las frases.
- Si, le falta la mecha, la "corbata"-(se la había arrancado mientras venía caminando cuando vio a la policía)- pero es para mojar las gomas nomás.
Dijo que el puente estaba todo enrejado, otra opción era colocarles unas cañas que tenían y mostrarlo desde abajo, pero uno de los chicos conocía un método para pasarlo que se usa en la cancha y lo pusieron, aunque demoraron minutos que a Juan le parecía demasiado valiosos.
- Cuando lleguen los bombos arrancamos- anunció.
La policía podía volver en cualquier momento. Se mojó el pelo, lo ató y se puso una gorra negra para evitar las fotos de la policía. Se le acercó "el groncho", que junto con su hermano menor lideraban al grupo del apoyo.
- Che, lo hacemos igual? somos pocos.
- Sí, pero como no va a ser un corte total creo que nos da el cuero, lo que sí, no vamos a poder tener gente volanteando acá abajo en la colectora, no nos conviene dividir el grupo. Te animás a hacerte cargo de la seguridad?
- Sí.
- Ahí hay 3 palos, son más bien por si algún chofer se hace el loco.
- Ok
Llegaron 2 con los bombos.
- Vamos!- gritó Juan- vení conmigo a hacer punta allá adelante- le dijo a otro, agarraron un par de gomas y avanzaron- Una vez que cortamos nosotros allá ustedes ocupen ahí y prendan 2 gomas más- señaló 20 metros más atrás. Avanzaron por el pasto que los separaba de la Panamericana. Le mandó un mensaje a su compañera "llamá". Este era el momento clave, ya la policía no los podía frenar, ahora el único problema era no generar ningún accidente. La panamericana de cerca parecía imposible de cortar, pero no era imposible. Hizo señas con un brazo y prendió fuego la goma al costado del camino, la columna de humo iba a ir previniendo a los que venían atrás. Ya habían empezado a frenar, el compañero arrojó la otra goma a la mitad del carril, Juan pateó la suya y se mandaron haciendo señas y desviando el tránsito. El riesgo les disparó la adrenalina, si alguno amagaba seguir había que saltar de la ruta. Una vez desviados los primeros se generó el cuello de botella que frenó a los de atrás, ya empezaban a circular despacio y la ruta era de ellos, se dio vuelta y vio que empezaban a ocuparla más atrás y prendían las gomas. Sonrió. No había habido accidentes y la acción ya estaba hecha. El hecho político iba a llegar al municipio. Ya era un triunfo, lo peor que podría haberles pasado hubiese sido un corte frustrado por la policía, después de tantos meses que la primera acción fuese un fracaso los hubiera desanimado demasiado. Había un sol infernal.
- No se dispersen! Todos juntos!
Las mujeres empezaron a volantear, el abuelo de Ramón trajo un par de ramas y sumó combustible a las ruedas. Pensó que no iba a participar, pero le gustó verlo ahí.
- Somos dos gatos locos- se rieron con el groncho. Si no fuera por las gomas no podrían haber cortado, apenas llenaban un carril.
Los bombos empezaron a sonar. Un camión pasó a toda velocidad por el costado y lo putearon, el abuelo le tiró una rama. Juan decidió ir adelante y evitar que eso vuelva a pasar.

La acción

Bajo del subte miro la hora y subio por la escalera a las apuradas. Para ese tipo de accion le parecia importante ser puntual. Lo unico que sabia era donde tenia que estar, a que hora, y conocia un solo contacto. Sabia cual era el verdadero objetivo y el motivo de la accion, pero no tenia mayores detalles ni sabia cuantos serian, si iba a ser una accion masiva o no, si se convocaria a los medios o no.
Cuando dos semanas antes Arte le contó lo que se iba a hacer y que los compañeros de MTR preguntaban si alguien de CIBA queria sumarse le pidió que lo enganche, y a los pocos dias cuando terminaba una reunión del espacio "La Dignidad no se privatiza" un espacio multisectorial que se juntaba en el local de CIBA todos los lunes, Arte lo acerco a Lucho, Juan no sabía que Lucho era del MTR.
- Acá hay un compañero que se quiere sumar a la accion del 5
Se dieron la mano, se tenian vistos de varias marchas pero no se conocían.
- Es un compañero de máxima seguridad?
- Si, es el compañero que estuvo en Honduras.
- Ok.
- A qué hora dónde?- dijo Juan
- A las 5 en el obelisco
No necesitaba saber más

Preguntar si era un compañero de máxima seguridad significaba saber no solo si ya estaba investigado y no era un inflitrado de los servicios de inteligencia sino tambien si era un compañero que sabia moverse con criterios máximos de seguridad, trabajar como si todos los telefonos del mundo estuviesen pinchados, y no contarle lo que hacia ni a su madre.

Mientras se acercaba al obelisco iba tratando de detectar policias de civil y miraba ya de lejos a ver si veia a Lucho. Todavía no habia llegado pero habia un grupo de 4 compañeros que tenía vistos de reuniones y marchas y se la jugó.
- Hola
- Cómo anda compañero?-lo saludaron como si lo esperaran
- Lucho?
- Esta por llegar
Eso confirmó que era el grupo indicado, saludó a todos. Uno era Rafa, estaba llendo a las reuniones que CIBA había empezado a organizar los viernes para armar un taller con otras organizaciones contra los desalojos, y de paso empezar a sumar fuerzas de las organizaciones que se ocupan del derecho a la vivienda.

A los pocos minutos llegó Lucho y despues fue llegando gente. Ahi se entero de que sería una accion masiva, llegaban familias humildes atendidas en un barrio por el MTR. Habian planificado llegar al objetivo a las 7. Se acercó un policia de civil, saludó a Lucho y pretendio saludar a todos.
- Disculpame, quién sos?- le pregunto Rafa, dejandole la mano tendida sin responder el saludo
- Perdon, él me conoce, oficial Vega, de la Federal- dijo casi timidamente
- Vamos a Jefatura- le dijo secamente y dio por finalizada la conversación
El policia se alejó hasta otro tipo de traje para informar por nextel a otro lado. El objetivo no era Jefatura, pero quedaba al lado. La mayoría de las veces informaban el objetivo real, porque no perjudicaba la accion, en este caso necesitaban el factor sorpresa.
Se juntaron los dirigentes.
- Cuando lleguemos a la esquina de jefatura no nos detenemos.
- No nos conviene manifestar un rato ahi y después cruzar?
- No, la cana va a tener tiempo de acomodarse y rodearnos, seguimos de largo Un grupito corta Rivadavia y no levanta el corte hasta que terminemos de entrar, si está abierta la puerta del costado nos dividimos en dos, y algunos van entrando por esa puerta, que es angosta, asi que por esa puerta los cochecitos entran al final, para no trabar, si está cerrada entramos todos por la puerta principal. Una vez que estemos adentro llamamos a los medios. Lucho, vos te encargás de los compañeros de seguridad, vos de los que cortan las calles y vos del grupo que entraria por el costado.
Asintieron con la cabeza. Se disolvio la reunion Lucho fue a convocar compañeros para la seguridad, y los otros a los demas.
Juan tomo un par de mates con otros militantes de MTR. Cuando Lucho estuvo libre le dijo que si le parecía cortaba calles y despues se sumaba a seguridad. Lucho asintió y se lo presentó al encargado de cortar las calles.
- Te venís conmigo, cortamos Lima primero y despues nos vamos para adelante.
- Ok.
6 y media extendieron la bandera grande y empezaron a armar la columna. Fueron a cortar Lima y la gente bajó a la calle.
Empezaban los bocinazos y las puteadas de rutina, las ultimas semanas estaba habiendo muchos cortes y movilizaciones. Por lo general esa acción se hace con palos. Los palos no son solamente para defenderse de la policia sino tambien para defenderse de alguien que igualmente quiera avanzar con el auto o se baje a agredir. Ese dia no tenían palos asi que hacían gestos decididos indicando que no iba a pasar nadie. Juan alguna vez había discutido con alguien que le decia"tu derecho termina donde empieza el mio, yo tambien tengo derecho a circular" "si, pero hay derechos que tienen prioridad sobre otros, el derecho a un techo, el derecho a comer, a la educación, es mas importante que el derecho a circular. Ademas en la ciudad siempre el transito está trabado, te aseguro que si la manifestacion se esta moviendo no perdes mas de 5 minutos, y si esta cortando una arteria, el desvío no te lleva mas de 10, lo que pasa es que hay mal humor en la calle y cualquier cosa lo dispara, pero hay que tener comprension con los que tienen menos y no son escuchados de otra forma"
La columna estaba por abandonar 9 de Julio asi que corrieron, la pasaron y fueron a cortar una de las calles laterales antes de que pase la gente. Y asi, iban esperando que pase el último y corrían para adelantarse a la siguiente calle.
La columna iba avanzando rápido porque Juan había avisado que a veces ese tipo de institución cerraba inmediatamene después de terminada la ultima actividad, y por ser día de semana estarían terminando.
Faltaba una cuadra y les subió la adrenalina. Estaban muy acostumbrados a manifestar, pero una toma es algo diferente. Es algo que aunque se haga pacificamente es más violento, y es una accioó más expuesta a la represion y la cárcel. Siempre existía la posibilidad de que la informacion se hubiera filtrado y los estuviesen esperando.
Hacia apenas 2 dias, un chico en un acampe sobre la 9 de Julio se habia alejado de la columna para comprar algo con otros 3, había llegado un auto particular con policia de civil, lo habian agarrado, cuando los otros quisieron recuperarlo dispararon al aire, lo raptaron, y lo molieron a palos: tenia 8 huesos rotos, la cara deformada y estaba en el hospital. Pretendieron imputarlo por intento de robo (total es un chico de barrio, tiene cara de "villerito") pero cuando la abogada del movimiento fue a la comisaría consiguió su liberacion inmediata porque la causa hacía agua por todas partes, empezando porque no existían los datos de la persona que supuestamente habían querido robar.
Ya estaba a la vista el objetivo y corrieron a cortar Rivadavia. La puerta del costado estaba cerrada, se sumaron algunos compañeros más a cortar y Juan fue con Rafa hacia adelante guiando la gente.
- Entren, entren- les decían, indicando lo mismo con las manos.
- Entramos?- dudaron algunos. Ahí se dio cuenta de que la gente no estaba informada de la toma. La información estaba compartimentada para que no se filtrara.
- Si, entren.
Algunos señores de traje salian con cara de no entender mucho lo que pasaba.
Juan entró
- Vayan ocupando los bancos compañeros!
Y empezó a recorrer los pasillos laterales revisando que no hubiese nadie sospechoso y fichando los lugares por donde les podrian entrar para desalojarlos. Recien adelante de todo, había dos puertas laterales en el ala izquierda. Otro compañero revisaba el pasillo de la derecha. Fue hasta adelante para seguir indicándole a la gente que se sentaran, cruzo a Rafa y le asintio con gesto de que iba todo bien, y volvió hacia el fondo, revisando los laterales nuevamente.
Una señora rezaba arrodillada en uno de los altares laterales del fondo, de espaldas a la gente y chistó pidiendo silencio. Estaban entrando en silencio, pero movian un poco los bancos al acomodarse y algunos chicos hacían ruido inevitable, la señora volvió a chistar indignada y se dio vuelta. Cuando vio la multitud entrando se paro y fue hacia Juan.
-Que esta pasando?
- Estamos tomando la catedral, señora, tenemos hambre- respondió Juan
El rostro endurecido de la mujer cambió. De golpe tuvo menos arrugas.
- No, claro, esta bien, y que piden?-
- Queremos que monseñor interceda por nosotros frente al gobierno.
- Los va a ayudar, vas a ver, lo que si querido por favor no rompan nada.
- Quedese tranquila, vamos a cuidar todo.
- Esa cruz que esta en aquel altar es del 1800. Por favor te pido
- No se preocupe, yo me encargo.
- Gracias, querido.
Se ubico frente a la gente. La imagen de la catedral metropolitana tomada por la gente era impresionante. Ocupaban todos los bancos, las mujeres atendian a sus hijos. Era evidente que no estaban ahi para rezar, era evidente que necesitaban mucho. La escena tenia una paz y una justicia casi misteriosa. La Iglesia tomada por los pobres.
Rafa empezo a caminar por el centro y hablo fuerte:
- Compañeros, venimos a este lugar de fe, para pedirle al obispo Bergoglio que interceda ante sus amigos del poder...
Vio que desde el ala derecha aparecia alguien que parecia trabajar ahi.
- Sos el sacristan?
- Si, que esta pasando?
- Te consigo un responsable- no tenia drama en hablar con un pibe de veintipico de años que en definitiva no iba a entender nada, pero eso ya empezaba a formar parte de las negociaciones, el no conocia los detalles del reclamo y no era del MTR.
Por el ala derecha encontro a uno de los coordinadores y le hizo señas para que se acercara.
- ...Compañeros! nos quedamos?- remataba Rafa
- Si!!- respondieron 300 voces a coro y aplaudieron
- Queremos hablar con Bergoglio- empezo a explicar al sacristan
- No esta en la ciudad-
- Lo esperamos, no tenemos apuro-
- Pero yo me tengo que ir, tengo que cerrar a las 7- el pibe no cabia en su asombro
- Y los curas de la catedral?- intervino Juan
- No estan
- Bueno, nosotros nos vamos a quedar, si queres llama a otro para que se quede, llama a los curas, y sino andate y dejanos abierto, no nos vamos a ir de aca. Y vamos a necesitar un baño
- No hay
- No hay un baño en sacristia?
Lo sorprendio
- Bueno, si, pero es privado
- Bueno, fijate como vas a hacer porque no queremos ensuciar la Iglesia.
Parecia como si le estuvieran hablando en otro idioma, si hubiesen sido vacas entrando a pedirle pasto hubiese reaccionado de la misma manera.
- Es un sacristan, lo unico que sabe hacer es preparar el altar y abrir y cerrar la puerta, no tiene idea, hay que esperar que llegue alguien mas.
Aparecio Lucho, sonriente
- Y, como lo ves?
- Espectacular, el piso va a estar un poco frio, pero un lujo- sonrio- che, tenemos que gestionar el baño, el pibe que esta a cargo por ahora no lo quiere habilitar.
- Sino lo tomamos.
- Dale, averiguo de que lado esta sacristia.
Se fue hacia el ala izquierda, casi llegando al final de la Iglesia, pero no le parecio que las puertas de madera dieran a sacristia, cuando volteo estaba la mujer del principio, con un rosario en la mano.
-Disculpe que le interrumpa el rosario, la sacristia esta del otro lado, no?
- Si- sonrio con una paz que le parecio artificial- cuiden todo, por favor, querido
- Quedese tranquila.
Se le acerco a Lucho
- Esta de aquel lado, reclutate 10 compañeros y vamos- mientras Lucho los juntaba le parecio que una mujer le decia "padre Martin" y un señor de camisa normal pareciendo querer pasar desapercibido asentia en voz baja. Se le acerco.
- Padre Martin?
- Si?- respondio con su mejor cara de hijo de puta.
- Necesitamos un baño
- No, pero yo no se los puedo habilitar.
- Usted es el parroco?
Se sorprendio por el uso del termino
- No, soy el vicario
- Y el parroco?
- Esta en su dia libre.
Justo entraba la policia, todos de civil. El sacristan camino hasta ellos, llamo al padre y se fueron hacia sacristia.
Los policias se ubicaron para impedir el acceso a sacristia. Aparecio Lucho con los 10
- Vamos.

(falta un cacho..)

El desalojo

Estaba entrando al edificio dónde vivía. Era una de las casas que CIBA tenía a cargo, había sido un hotel alguna vez, la gente pagaba a un supuesto encargado que un día resultó no ser el dueño y desapareció. Apareció el dueño real y les dijo que los iba a desalojar. El juicio ya llevaba más de un año, los abogados de CIBA lo habían estirado todo lo posible pero ya se habían agotado las instancias judiciales y estaba la orden de desalojo que tenía que darse en esos días. En teoría hasta el 18 tenían tiempo de abandonar la casa pero por si acaso ya iban preparando algunas cosas y todos los días alguien se levantaba cerca de las 5 para ver si la policía empezaba a preparar el dispositivo temprano. El se había mudado a una de las piezas que daba al balcón para eso, y para que si los sorprendían, hubiese por lo menos un militante de CIBA adentro, porque una vez que cerraran el vallado ya no iba a poder entrar nadie. Al principio eran como 30 familias pero desde la orden de desalojo algunas se habían ido por miedo y quedaban 12 familias dispuestas a resistir el desalojo.
Abrió el candado de su habitación, dejó la mochila, prendió la luz, despidió a las cucarachas que corrían a esconderse y salió a tocar la puerta de la habitación de Hilda.
- Cómo estás?
- Bien che. Me prestás lo de siempre? ya voy a traer el mío- sonrió
- Yo no tengo problema en prestarte el mío.
Hilda buscó entre sus cacharros de cocina el matecito y la pava.
- Yerba tenés?
- Sí, gracias.
Pasó por el baño y comprobó que no hubiese más agua. Por lo general a la tarde se acababa, pero a veces quedaba un poco, asi que fue a la manguera que habían colocado en el patio, que venía desde un caño del sótano y no se acababa. Puso a calentar el agua en la cocina común.
- Hola! vos sos de CIBA?- siempre le preguntaba lo mismo, era una nena de 5 años.
- Sí Anabella, cómo estás?
- Bien. Hacés magia?
Sacó una moneda.
- Qué es esto?
- Una moneda!
Se la pasó de una mano a otra
- Dónde está?
- Ahí!
- Estás segura?
- Sí!
Abrió la mano vacía y disfrutó la cara de sorpresa de la nena. Ése era el mejor momento de la magia.
- Dónde está?
- Desapareció!
- Qué aparezca!
- No se puede, desapareció- revisó que el agua no hirviese.
- Sí, que aparezca, dalee
- Llamémosla
- Moneda! moneda!
- Ahí está!- hizo el viejísimo truco de que apareciese en su oreja- no te habías dado cuenta de que la tenías en la oreja?
Anabella se rió y salió corriendo
- Mami mami!
El agua ya estaba, apagó el fuego, agarró la pava con su propia remera y volvió a la habitación.
Dio vuelta un balde, se sentó, acomodó una imagen de Jesús que tenía sobre otro balde apoyada contra la puerta ventana del balcón y tomó unos mates mirando hacia la avenida corrientes y a veces hacia la imagen. Era el momento de paz del día.
Adentro de la habitación había una cama con una bolsa de dormir arriba, un bolsito y elementos que había ido consiguiendo y armando para resistir el desalojo. Garrafas, bombas caseras, gomeras, piedras, palos, escudos caseros, matafuegos. Destapó un tacho lleno de aceite quemado que tenía en el balcón, agarró una botella de vino, un embudo y un pedazo de botella de plástico cortada que le servía de tachito. Revolvió el aceite, sacó un poco con el tachito y lo metió en la botella de vino con el embudo. De una bolsita sacó un poco de jabón blanco rayado lo tiró en el embudo y empujó con un destornillador para que se fuese mezclando con el aceite. Destapó un bidón y terminó de llenar la botella de vino con nafta. El jabón hacía que el líquido resbalase mejor y el fuego se esparciese más, el aceite hacía que desprendioera humo negro. Agarró un corcho, con una navaja le recortó un poco uno de los bordes para que entrase mejor. tapó la botella y golpeó despacio con una masa para meter bien el corcho, prendió una vela y derramó la parafina en los bordes del corcho para que no saliera nada de aire. Finalmente le pegó con cinta desde el cuello un trozo de tela negra que serviría de mecha y agregó la molotov a las que ya había creado.
Le tocaron la puerta.
-Pasá-
Era Hilda, se la veía alterada, tenía el celular en la mano
- Llamaron de Tucumán-en CIBA nombraban a las casas según la calle donde estaban- los están queriendo desalojar ahora.
- Avisale a Arminda.
Se levantó y fue hacia el patio, poniéndose la campera. Tocó la puerta entreabierta de la habitación del gordo. La luz estaba apagada pero estaban mirando la tele
- Quién es?
- Juan.
- Qué pasó?
- Están queriendo desalojar a unos compañeros acá a un par de cuadras, venís?
- Dale, aguantame que me lavo la cara y voy.
- Dale.
Volvió a su habitación. Puso una bomba casera en la mochila, un encendedor en el bolsillo, agarró un palo y la masa. Cuando salió Hilda había llamado también a una chica del fondo. Fueron bajando, se unió el gordo prendiendo un cigarrillo y salieron. En el camino le dio la masa al gordo y la chica del fondo le pidió el palo.
- Dame el palo, yo estoy re-caliente con estos hijos de puta.
Porque no era un desalojo hecho por la policía. Era gente de la misma casa. Había muy pocos de CIBA adentro, la mayoría no querían unirse porque querían negociar con las piezas, y no querían una organización que pusiera orden adentro de la casa. No eran los dueños pero patoteaban para cobrar alquiler o "vender" las piezas, aunque toda la casa estaba en juicio de desalojo. Y había una parejita joven que no podía pagar y los querían desalojar por la fuerza. No solamente era ilegal sino que además era una actitud miserable: ponerse en juez de otro que está pasando la misma necesidad.
- No vienen más de otras casas?-perguntó el marido de Arminda, con mucho miedo en la mirada.
- No creo, vos le avisaste a alguien?
- Llamé a Jorge y creo que él iba a avisar a Gardel- respondió Hilda
- No van a llegar antes que nosotros- y, en realidad, tampoco creía que fueran a ir.
Eran 6, 3 hombres y 3 mujeres. Era una resistencia totalmente atípica, por lo general son bien organizadas y con más de 50 compañeros, ésta era improvisada y con pocos. No sabía realmente cuántos eran en la casa, pero tenía que mostrarse seguro, para no hacer dudar a los demás.
En la puerta había unas mujeres tomando fresco, Juan dijo "buenas noches" y entró directamente seguido de los 5. Vio que pasaba algo en el fondo, pero subió al primer piso a ver a Ivonne. Se la encontró en el pasillo. Sacó la bomba de la mochila.
- Son los de abajo?
- Sï, vamos!
Volviéron a bajar y se mandaron para el fondo. Había un peruano bastante en pedo hablando a los gritos frente a la habitación donde estaba la parejita. Sabía que tenía que entrar fuerte, esperaba que la adrenalina actuase rápido pero en vez de eso notó que la situación lo empezó a enojar.
- Qué pasa compañero?!- gritó y como el pasillo no era muy grande la voz sonó fuerte. Tenía la bomba en una mano y el encendedor en la otra. Dejaba los brazos caídos por el momento, pero sabía que ya los otros la habían visto, era bastante notoria y le colgaba una mecha de unos 20 cm.
- Nada, estoy hablando con él
- Sí, y yo me estoy queriendo meter asi que o me contás...
Se sumaron 2 tipos más atrás del peruano. Juan no era alto pero les llevaba una cabeza a los tres y los miraba de arriba. Pensó que al pedo habían traído los palos.
- Mira, cuando tú arreglas algo con alguien, y el otro no cumple con su palabra.
- Y qué arreglaron?
- Que él me iba a pagar una cantidad de plata..
- Cuánto?- le preguntó al varón de la parejita
- 800
- Parece mentira, entre paisanos!- dijo Ivonne y el otro se sintió tocado
Estaba por decirle que no iba a cobrarle nada a nadie y que si intentaba desalojar a alguien le iba a volar la pieza, cuando vio que al fondo empezaba a entrar la policía. Había un codo en el pasillo que lo tapaba, donde estaba Arminda. Se agachó , apoyo la bomba en el piso detrás de Arminda y le dijo "quedate ahí".
- Qué está pasando?
Eran 3 canas, uno había entrado con la escopeta en la mano, le sacaron el palo de la mano a la chica. Antes que los otros dijeran "ellos entraron a apurarnos con palos" explicaron ellos.
- Ellos quieren echar a esta familia a la calle.
-Mire señor yo le voy a explicar- saltó Eva, otra mujer que vivía en la casa y asistía a CIBA- aquí estamos todos en desalojo, asi que nadie tiene derecho a cobrarle a nadie y ellos quieren cobrar como si la casa fuera de ellos.
El cana levantó el palo y se lo mostró a uno de los peruanos.
- De dónde sacaste este palo?
- No es mío!
- Nos van a tener que acompañar- y se los llevaron afuera. Quedó un cana adentro- y ustedes quienes son? viven acá?
- Ellos son de una organización que nos ayuda- dijo Eva.
- Pero acá están todas embarazadas! Tené cuidado vos nena no te quedes mucho tiempo..-agregó el cana, se rió y se fue. Guardó la bomba y la masa en la mochila.
Juan le extendió el puño a Eva, Eva lo chocó y le guiñó un ojo
- Nos vemos.
- Gracias.
Antes de salir la chica le preguntó
- Recuperamos el palo?
- No, lo dejamos
Afuera los policías seguían preguntándoles de dónde habían sacado el palo y seguían negando que fuera de ellos. Juan sonrió, pasaron por al lado y siguieron hacia Corrientes.
- Corrientes tiene huevos eh? resiste con 6 nada más- dijo Juan y estallaron en anécdotas.
Al llegar se despidieron, cada uno fue a su habitación, volvió a poner las cosas en su lugar, tomó un par de mates medio fríos y se fue a dormir.